Hay personas que nacen con un don, un algo especial que nos permite al resto de los simples mortales disfrutar de su arte y su gracia, unas veces cantando, otras bailando, otras simplemente hablando y otras como tú, simplemente endulzándonos la vida a pequeños y mayores. Cuando una persona pone todo su cariño y amor en la elaboración de una tarta, un dulce o un simple pastel, pensando solamente en la ilusión que causará en aquellos niños y niñas que sueñan con princesas, con Hello Kitty, con un Nave espacial o con cualquiera de sus compañeros de juegos habituales en su más tierna infancia, el éxito esta asegurado.
Prima tu tien
es ese “don”, tu eres capaz de emocionarnos con una tarta de cerveza negra, una tarta de mojito o un sabrosísimo semifrío de turrón, con estilo en todas tus tartas, originalidad en la presentación, esmero en la elaboración, esfuerzo y tenacidad durante las horas de trabajo que no son pocas.
Estoy completamente seguro que cada tarta es un reto, un "más dificil todavia", pero tu cara nos delata tu satisfacción, cuando en el momento más mágico de un cumpleaños, cuando se soplan las velas, cuando el pequeño o pequeña cumple realmente sus años y es el protagonista absoluto de su fiesta, en ese momento tu felicidad es máxima, pues su sonrisa es tuya, su alegría es en parte por tu trabajo, su brillo en los ojos se refleja en tu mirada, porque te sabes parte importante de ese momento. Tanto es así, que humildemente, como siempre hacen las grandes personas, con ese pequeño pero grandioso momento, te conformas.
Espero que sigas conquistandonos e ilusionandonos con tus creaciones y engordándonos poquito a poco con tus sabrosísimas obras de arte.
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http://mercedes-nuestracocina.blogspot.com/
Como siempre, sacas al máximo lo mejor de todo. Siempre decorado con tus palabras, enalteces pequeñas cosas. Y... si, tienes razón. Doy fe de que en todas sus creaciones pone todo, su mayor ilusión. Nunca la habéis visto cuando las hace. Hasta el ultimo momento, hasta su finalización corren los nervios, las prisas y, como no, el descontento del artista. Siempre le parece poco.
ResponderEliminarGracias desde la parte que me corresponde.
Dos lágrimas resbalan en este momento por mi mejilla, de felicidad y de orgullo por tenerla como cuñada y como amiga.
ResponderEliminarNunca he llegado a verla en la cocina, pero la he visto el antes y el despues del comienzo de sus tartas. Cierto es que siempre le parece poco, siempre queriendo alcanzar la perfección en el bizcocho, en la trufa y en la terminación.
Para mi, todas las tartas que le ha hecho a mis niños, han sido perfectas y como tu bien dices, el momento de soplar y de comeeeeer.
Besos para la repostera y para ti, por saber explicar tan bien el "don" que la posee.